"Auto juicio durante el entrenamiento"
Por Karla García Villalobos



¿Cuando haces ciertos ejercicios volteas a ver abajo y notas los pliegues en tu abdomen? o ¿Cuando pasas por un espejo sientes el impulso de levantarte la blusa para checar tus abs? O ¿Entras al gimnasio o a tu clase de indoorcycling, vez a los o a las demás y piensas en que vas a meterle más para estar como aquella persona?
¿Sabías que somos los peores críticos?, la gran mayoría comenzamos a juzgarnos y a discutir con nosotros mismos sobre que comemos, cuanto tiempo y que tipo de ejercicio hacemos desde la adolescencia si no es que antes o después de esta. Nos hemos mirado al espejo y hemos comparado nuestros cuerpos con los cuerpos de otros, nuestros logros con los de los demás, entre muchas otras cosas.
Hemos aprendido a “ser duros con nosotros mismos” desde pequeños, justo cuando nuestros padres, tíos, personas adultas comenzaron a decirnos lo que podíamos o no podíamos hacer, justo cuando los “NO” tienden a dominar. Aquellas personas que solían decirnos “NO” por lo general lo único que querían era lo mejor para nosotros pero desafortunadamente gracias a esto aprendimos más sobre cómo “deberíamos ser” y no tanto a ser “lo que somos”, pues aprendimos a buscar la manera de y querer encajar en el molde. Convirtiendo el autojuicio en una herramienta para mantenernos en un camino “aceptable”.
Todo esto nos ha llevado a tratarnos a nosotros mismos de una manera muy dura, pues nos mantenemos bajo estándares ridículos que la sociedad nos ha impuesto, nos empujamos a nosotros mismos a ser y hacer más de lo que razonablemente podemos